La Puerta de Calahorra
Historia
La puerta de Calahorra, estuvo situada en la calle del mismo nombre, fue un elemento significativo de las defensas medievales de la ciudad. Su historia está entrelazada con los eventos más importantes de la época y refleja la complejidad social, política y militar de aquellos tiempos.
Función y Estructura, las Cárceles de la Puerta de Calahorra
El alcaide era el responsable del cuidado de los presos del castillo, por lo que recibía una cantidad diaria para su mantenimiento y cuidado, que variaba según la calidad o importancia de las personas encerradas. De la cárcel en la puerta de Calahorra se encargaba el justicia. Los presos pobres eran alimentados por cuenta del reino, pero los que tenían posibles pagaban su comida, cantidad que era conocida como “carcelaje”.
Los presos que se escapan de la cárcel – “quebrantadores de prisión” se les llama en los documentos – eran condenados a muerte, siéndoles confiscados todos sus bienes: en el año 1345 fue ahorcado en Tudela un preso, “porque crebantó y robó la presón de Tudela en que seya preso”
1330 En las torres de entrada a la ciudad por la puerta de Calahorra existían igualmente unos calabozos, que son citados en diversas ocasiones. El funcionamiento simultáneo de ambas cárceles, nos la indica en el año 1330 la compra de una trampa para la cárcel de abajo, esto es, la de la puerta de Calahorra. Dice el documento “una trapa pora la cárcer iusana” lo que nos está indicando la existencia a un tiempo de una cárcel de arriba, del suso, y otra de abajo del yuso.
Cuatro años más tarde, en diciembre del año 1373, por recelos que levantaba el rey Enrique de Castilla, al merodear con sus compañías esta zona, el merino de la Ribera y capitán de la merindad ordena al baile de Tudela que mande reparar en la muralla tudelana cierta obra derribada, concretamente en las torres de las prisiones del rey en la puerta de Calahorra, así como las puertas levadizas del castillo, haciendo tornos para que pudiesen ser levantadas.
En noviembre de este mismo año 1451 se trasladan ciertas ballestas, cañones y pólvora desde Tudela a Calatayud, y se reparan las cubiertas de las cárceles tudelanas sitas en la puerta de Calahorra. Un año más tarde en 1452 se paga a García Lópiz de la Puent, que guardó el castillo de Tudela con ciertos hombres y caballos.
Restos de la puerta en la casa que sobresale y la calle actualmente
Incidentes y Reformas
El año 1345 fue testigo de la ejecución de un preso en Tudela, ahorcado por haberse escapado y robado en la prisión. Este hecho destaca la severidad con la que se trataba a los «quebrantadores de prisión».
En diciembre de 1373, debido a los recelos provocados por el merodeo del rey Enrique de Castilla y sus compañías, el merino de la Ribera ordenó la reparación de la muralla tudelana, específicamente en las torres de las prisiones del rey en la puerta de Calahorra. También se ordenó la reparación de las puertas levadizas del castillo, instalando tornos para que pudiesen ser levantadas.
La Puerta en el Siglo XV
En noviembre de 1451, se trasladaron ballestas, cañones y pólvora desde Tudela a Calatayud y se repararon las cubiertas de las cárceles en la puerta de Calahorra. Un año más tarde, en 1452, se pagó a García Lópiz de la Puent por custodiar el castillo de Tudela con hombres y caballos.
Inscripciones y Leyendas
Página del manuscrito “notas del anticuario Juan Antonio Fernández, natural de Tudela” en el que copia la inscripción árabe que existía en la puerta de la muralla. Según traducción de Miguel Casiri de Gartia y de Ignacio Jordán Claudio de Asso y del Río, hecha en el año 1773
Notas en diferentes documentos donde se nombra la puerta
Visita del papa Adriano VI a Tudela
«Prestóse Tudela a recibir al nuevo Papa con la mayor solemnidad y regocijo mandando correos a Logroño para saberla fecha fija de su llegada. Busca el municipio paño negro de Contray para los capuces del alcalde y jurados, salen peatones a Zaragoza para comprar «las sabogas» de las comidas con que
Don Pedro de Villalón, Deán de Tudela – Francisco Fuentes
le obsequian las autoridades, ordenase la rápida reparación y limpieza de la puerta de Calahorra y su puente por donde había de entrar el Papa a la ciudad.»
Un día de marzo del año 1522 entraba en Tudela por la puerta de Calahorra un militar. Su porte y vestido indicaban distinción y nobleza innegables, expresando su semblante firmeza de voluntad y un espíritu reflexivo. Apeóse de la mula encaminándose a un mesón poco concurrido, tal vez el de la Campana, para dar reposo a su fatigado cuerpo a causa de la jornada recorrida. Tras un corto descanso volvió de nuevo a montar en su cabalgadura saliendo de la ciudad por la Puerta de Zaragoza en dirección a Pedrola. Este soldado que, procedente de Aránzazu, había cruzado la Rioja y parte de la Ribera de Navarra, marchaba a Montserrat como romero mariano para convertirse de capitán en mendigo, de militar en penitente. Era Iñigo de Loyola, el futuro fundador de la Compañía de Jesús.
La Compañía de Jesús en Tudela
(1578-1600) de Francisco Fuentes
Otra muralla daba principio en la puerta de la morería: era ésta la que hoy llamamos puerta del Mercado; estaba defendida de dos torres muy fuertes y elevadas, a cada lado la suya; desde la que estaba a la izquierda, entrando, corría la muralla por la casa de Rodríguez, Garcés, el Cofrete, y volvía a unirse con la muralla de la Morería, por casa de Don Ignacio de Mur. Sobre el río de Mediavilla, iba otro trozo desde la casa de Joaquín Garbayo, y subía en derechura hasta la cárcel vieja, en la puerta de Calahorra, y seguía por toda la cava dando vuelta al castillo; había varios baluartes, castillos y torres, y algunos hemos conocido en nuestros tiempos. De la puerta de Velilla, comenzaba otra, que seguía la huerta de Dominicas, Dominicos, hasta unirse con una fuerte torre, que hoy se ve al embocadero del río de Mediavilla, en la ciudad.
Tudela en el reinado de Don Sancho cuarto de este nombre, llamado el mayor. Rey XIV de Navarra
Fray José Vicente Díaz Bravo
1516 – Muerte de Fernando “el Católico”. Extensión de la Pragmática castellana de 1502. Conversión forzosa de los mudéjares de Tudela. A partir de este momento a los “convertidos” musulmanes se les conocerá con el nombre de “moriscos”. Pocas conversiones. Al menos quedaron 200 casas –unas 1000 personas–, vacías en Tudela. Partieron en general a Aragón, pues allí se les permitirá residir hasta 1526. Se realiza la demolición de las torres de la Puerta de Calahorra de Tudela. El Consejo de la Inquisición de Navarra entre 1515 y 1521 tuvo sede en Tudela de Navarra.
Miguel Serveto o miguel de Villanueva, su relación con navarra …
Francisco Javier González Echeverría
Rendicion de Tudela a los castellanos
La última carta de Tudela a su reina, que encontramos en el archivo municipal, lleva fecha de 3 de septiembre; tampoco encontramos, es que la hubo, contestación a la misma. Carta que traduce la desesperación de los tudelanos, solos, amenazados por las fuerzas de Castilla y Aragón, sin esperanza de ayuda de sus reyes, ni de sus compatriotas. La carta que habían escrito a D. Francisco de Luna y al conde de Ribagorza había tenido éxito. El arzobispo, antes de recibir la carta de su padre y rey, a que anteriormente hemos hecho referencia, amplía a quince días el plazo que concedió a la ciudad para su rendición, si bien exige ciertas garantías: veinte personas en rehenes o seis personas y las torres del portal de Calahorra
La Desaparición de la Puerta
La destrucción total fue en 1804.
Bibliografía:
- La Tudela desconocida aspectos recónditos en la historia de la ciudad (II) – El castillo – Las murallas – Autor: Luis María Marín Royo.
- Don Pedro de Villalón, Deán de Tudela – Francisco Fuentes
- La Compañía de Jesús en Tudela (1578-1600) de Francisco Fuentes
- «Tudela en el reinado de Don Sancho cuarto de este nombre, llamado el mayor. Rey XIV de Navarra» – Fray José Vicente Díaz Bravo.
- Miguel Serveto o Miguel de Villanueva, su relación con Navarra – Francisco Javier González Echeverría
- Foto de los restos de la puerta en blanco y negro del Diario de Navarra
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